miércoles, 4 de febrero de 2015

Yo soy un chavo de bloggera

Fue en el post anterior donde le menté su madre a Yayoi Kusama, sí, y deben saber que lo seguiría haciendo si fuese necesario... sin embargo, mi hígado esta estratégicamente dividido para repartir odio a diversos personajes entre los cuales en este blog sólo he hablado en pocos párrafos sobre José Vasconcelos y sus mocosos cósmicos, o Dalí entre muchos otros personajes (en algún momento me dijeron que este blog debería llamarse "el buzón de quejas de Adán"), por lo que mi hígado no puede estar dividiéndose tan seguido, ya que hay que tener un poco de espacio para el alcohol...

El punto es que si bien se le puede mentar su madre a Yayoi Kusama todos los días hay que tener una referencia que sostenga dicha opinión y si creían que no la tenía, pues... sí la tengo...

Fue en la estación del metro...

Estando en la sintonía de que todos contamos con gustos culposos debo admitir que me gusta cierto género musical (por ratos, tampoco es pa' tanto) que si eres una persona conocedora de música muy chafa ya te habrás dado cuenta de qué género es.

Y no es para menos, hay quienes a su gran edad gustan de cosas muy infantiles, aunque el poner ejemplos sería una especie de excusa y la utilización del argumento se vería como escudo o justificación de lo que digo cuando en realidad no debería ser así.

This is Charly Montana
Tienes que saber que también estas
canciones son para COTORREAR
Pues sí, cada que se alinean los planetas y me veo en la penosa necesidad de tirarme un rato a la mierda por mis broncas mentales me gusta escuchar un poco de Rock Urbano, sí... ese del que escucha el camionero con peinado de Charly Montana, ese del que escucha el viene-viene de la librería donde trabajaste, ese del que escucha el vendedor de discos piratas que se pone los domingos y que vive 2 calles abajo de tu casa y que además gusta de andar en motoneta con su hijo. Sí, de ese tipo de música me gusta de repente.

Anda, miéntame la madre ¡Este es tu momento! Quizá sólo así puedas vengar las eruditas palabras que le dije a Kusama ya que se te nota que te encantó haber estado en un cuarto con pitos de peluche en el piso o en su caso te habría gustado haber estado.

A diferencia del reggaeton (que podría ser tu gusto culposo), este género cuenta historias ocurridas en las calles (ya que el tema de la psicología de la vida cotidiana es un tema que me llama mucho la atención cuando de las calles se tratan), historias que pudieron haber sido ciertas o sólo productos de semánticas gastadas, es por eso que me gusta dicho género, porque aunque son contadas las canciones que me gustan, las historias que cuentan de verdad me llegan a lo más profundo de mi... ¿cómo lo llaman?

Ah!... 

corazón (sí, claro).

No se desesperen Príncipes Aztecas/Reyes del Nopal, que se pondrá mejor.

El DFectuoso

- Hola, mi nombre es Jeraldiny Romero Erasto (Jeraldiny, sé que en algún momento googlearás tu nombre y darás a este espacio, pero es que ver tu nombre en un papel en el metro no pasa desapercibido, Whatever that means)
- Hola, mi nombre es Fernando
- Mucho gusto, Fernando...

(Muchas noches de altura y conversaciones libidinosas o conocidas como "pláticas filosóficas postcoitales" después)

- Aaaay Jeraldiny, me da mucha hueva tener que dejarte hasta tu casa, me caga que vivas en el Establo de México.
- ¡Qué grosero eres! Así no me tratabas cuando me conociste
- Es que quién te manda a vivir en un pinche pueblo culero, casi casi me tengo que regresar en burro, cruzar dos ríos en Kayak, cruzar 5 héctareas de cultivos de marihuana y con el inminente riesgo de ser asaltado por un niño mexiquense de 8 años con una 9mm

Jeraldiny con toda la justificación decide cortarlo, pa' que se le quite lo pinche graciosito.

Este es el típico caso cuando se conoce a una persona nacida (y vivida) en el DFectuoso. Evidentemente todo mundo conoce las ventajas de tener la ciudad muy cerca, dicha ciudad tiene tanto que aportar, pero seamos sinceros... cuando se trata de llegar al trabajo o a la escuela, todos esos chilangos no creo que se sientan felices de estar atorados en el tráfico o de fusionarse en el metro con otros cuerpos, porque cuando son vacaciones da la casualidad que la ciudad está vacía porque dichos chilangos están disfrutando de las maravillas que nuestro bello país aporta, para darse una escapadita a las riquezas naturales y olvidarse del tráfico, del estrés, del smog y de tanta gente (estaba pendejeándolos eh).

Y para ilustrar dejo estas bellas palabras:

“Tal altanería, combinada con la idea de que fuera de México todo es Cuautitlán, constituye la infraestructura psicológica del chilanguismo. Agréguese el centralismo irreductible del gobierno y la abyección de los millones que ignoran que ‘mandatario’ significa ‘mandadero’ y no ‘mandamás’, y tendremos la explicación de esa imaginaria superioridad que convierte a algunos capitalinos en chilangos al momento en que salen a la provincia. Huelga decir que mientras más civilizado sea un capitalino, más ajeno es a esa barbarie. Diría el gran Ortega que no es más que una manifestación local de la rebelión de las masas, cuyos entes llegan ‘al interior del país’ a enjuiciarnos sin más criterio que su ignorancia, ni más autoridad que la de venir de la capital. Del odio suscitado por el centralismo en general y por el chilango en particular salió la igualmente odiosa consigna de ‘Haz patria: mata un chilango’."
Artículo: "Chilangos y chilanguismo"

"Erres verrdaderramente trremendou. Mexicanou you Beaner"
Pues sí CHILANGOS, este post es en honor a la Ciudad de México, no a ustedes. Recuerda que "Chilango" no es un gentilicio, si lo reflexionas puede llegar a ser un término despectivo...

Pero ¿Por qué la mayoría de los chilangos es así? ¿Es mera casualidad? No lo creo, subrayemos que el argumento principal del que hacen uso los chilangos para alzarse el culo es que el transporte es primermundista (tampoco que no mamen), el metro es la verga (it is)... pero ni siquiera ellos conocen la historia del metro, es por ello que este autor viene a matar 2 pájaros de un tiro.

Bien, el metro es un gran argumento para sentirse bien viviendo en el DF, es decir...


"¡Cámara mijo! Te topo en la estación Marcel Proust"
¿Quién no se ha visto en la necesidad de cometer una escena de enfado/celos/drama en alguna estación del metro? todo hemos visto que en diversas estaciones se cometen crímenes amorosos de tal barbarie, actos ante los cuales la multitud no puede pasar sin ignorar porque parece que le competen, inclusive hay estaciones donde se cometen dichos crímenes en sus escaleras donde nadie transita para evitar que la escena del tiro de gracia sea menos indignante, apenas sucedió en metro Chabacano, y en estaciones como Camarones o Aquiles Serdán las escaleras son perfectas para no dejar testigo. También incluyo las noches que se olvidan con dificultad, aquellas donde desde el cuarto (húmedo) colocado al 3er piso se puede escuchar el paso del metro con sus frenos porque está próximo a llegar a alguna estación generando un clima y un ambiente ideal para ocasiones de dicha naturaleza, habiendo terminado de la hazaña, se recurre a la despedida porque existe la posibilidad de que la otra persona viva a 27 km de distancia de casa, haciendo que tomen caminos distintos pero con el rito de tener que esperar el tren contrario, haciendo de la despedida algo... increíble.

Cada persona tiene una ciudad del mundo preferida por alguna razón, por ejemplo, quienes aman Nueva York seguramente están casados con el ideal de encontrarse vestidos de noche con la pareja caminando por las calles, las cuales, las alcantarillas dejan escapar una gran bocanada de humo blanco (siendo vapor). Ante la sensación de saber que se camina por Nueva York, esta bocanada de humo es la que se espera que sea que termine la noche al salir de la boca de ambos acompañantes en un cuarto tras estar fumando un gran cigarro.

Para el contexto de la Ciudad de México, el contexto es totalmente distinto, y dicho contexto se ve reflejado en gran medida en el metro gracias a las tipografías y los dibujos que se presentan, inclusive generando gran identificación con la ciudad.


Una ciudad a la Wyman 

Todos hemos visto los logotipos en el metro pero pocas veces nos detenemos a observar con gran detalle la importancia que tienen éstos dentro de la ciudad.
Lance Wyman *se quita el sombrero*, fue la persona encargada de diseñar los logotipos en el metro de la ciudad de México cuando se planeó la construcción de éste, esta persona cumplía con el perfil ideal para hacer este trabajo porque sus diseños iban más hacia la apreciación visual que a la que se puede llegar a través de la lectura, es decir; que si bien en el contexto de 1967 de la ciudad demasiadas personas no contaban ni siquiera con la primaria terminada la pregunta era ¿Cómo dar indicaciones a los ciudadanos para que entiendan por dónde ir, qué hacer, dónde bajar, dónde subir, qué no hacer dentro del metro si no saben leer?

Lance Wyman era el indicado para este trabajo, tanto hizo los trabajos de las señalizaciones (salida, taquilla, vagones, la "C" de correspondencia) así como el logotipo mismo del metro que significa las 3 primeras líneas del metro (la rosa, la azul y la verde) para formar una M, él también tuvo que hacer los diseños de las estaciones basándose en personajes históricos que correspondían al nombre de la estación (como Hidalgo), todo para que fuera más fácil ubicar las estaciones por su diseño que por su nombre, obviamente el nombre de la estación tiene una razón de ser y el logotipo ilustra perfectamente esta razón, he ahí donde se encuentra lo interesante de esta persona.
Salida

México 68
Sus trabajos en el metro se limitaron a ilustrar las 3 primeras líneas, el resto fue trabajo aparte pero con la intención de intentar conservar el estilo para que tuviera el mismo efecto, evidentemente no es igual, ya que si se comparan las ilustraciones se ve que las posteriores cuentan con una composición más compleja, cuando la intención de Wyman era hacer los dibujos lo más sencillos posibles.


Box
También los trabajos de esta persona se vieron en los diseños de diferentes cosas en los juegos olímpicos de 1968, hay una problemática por saber si el autor real de las letras "México 68" fue Wyman, en este caso supongamos que lo fue, pero se puede ver que cada disciplina en cada uno de los juegos olímpicos cuenta con una ilustración que lo identifica, y es curioso ver el caso del Box de México 68, ya que si se conoce la estación del metro Tepito se ve perfectamente que es la misma ilustración que se utilizó en el Box para los juegos...
Tepito





Para quienes indagan en conocer los grandes misterios que esconde la ciudad se debe saber que Tepito, lejos de ser un lugar para adquirir artículos ensangrentados, es un lugar al cual se le debe tener mucho respeto por (aunque suene muy mamón) su gran legado, me atrevería a decir que todo el DF está en deuda con el barrio bravo por diversos aspectos.


Mosaicos del metro Tepito

  1. Los mejores boxeadores que ha dado nuestro país han salido de tepito, este lugar ha producido grandes figuras del boxeo, entre las que destacan los ídolos de México: Raúl "El Ratón" Macías; Ricardo Moreno "El Pajarito"; José Medel "El Huitlacoche", quienes digan que es un criadero de ratas, sabandijas y demás caerían en el error ya que es la muestra idónea de la "bravura" que puede tener la gente pobre ante adversidades y la misma pobreza, esto repercute en quienes admiramos las obras de Wyman, porque sin la necesidad de haberlo llamado para ilustrar una estación del metro, es como si lo hubiera hecho.
    Mosaicos del metro Tepito


    Mosaicos del metro Tepito
  2. Los primeros y mejores tatuadores que ha dado México también se criaron en el barrio Bravo, en este caso también se debe a la colonia Morelos, su historia se remonta a varias décadas donde el tatuaje era mal visto y no se consideraba ni como arte, ni como profesión y ni se le debía mantener respeto (cuando en la antigüedad el portar tatuajes era sinónimo de respeto) por lo que no se reglamentaba haciendo que las máquinas para tatuar se construyan con piezas improvisadas como plumas para escribir, motores improvisados y demás artículos, uno de los pioneros dentro del arte del tatuaje y (principalmente) en el paso de la reglamentación del negocio para hacerlo "legal" se destaca a Toni quien ahora es dueño del Museo de Tatuajes y donde podrás encontrar toda la información de la que estoy escribiendo.
  3. Grandes luchadores como "El Místico", "El Santo" y el "Huracán Ramírez" así como uno de los máximos ídolos del fútbol nacional "Cuauhtémoc Blanco"



Todo esto y más, constituye el legado cultural del barrio Bravo ante el cual se le debe rendir mucho respeto. Y su resultado es aún más profundo, nótese que dicho lugar representa una total resistencia al poder, lugar ante el cual los poderosos son otros y no los de siempre, el poder formal se diluye en las calles para dar paso a nuevos líderes que venden artículos a precios accesibles que es bien visto por las personas que deciden comprar. Y es muy curioso, porque si se nos ha plantado la idea de que comprar artículos en tiendas departamentales está bien (aunque muchas veces son artículos de mala calidad a precios altos), este lugar es una resistencia ante dicho estereotipo al vender algo de (posiblemente) mala calidad a precio bajo, por dicha razón es un lugar manchado, con cierta reputación...

En este tipo de lugares quienes tienen miedo no son las personas de siempre.

Ahora... actualmente y hasta el 22 de febrero de este año estará la exposición "De ida y vuelta. Lance Wyman, íconos urbanos" en el Museo Universitario de Arte Contemporáneo de la Ciudad Universitaria (UNAM), la cual muestra el trabajo realizado en diversos países por Lance Wyman, obviamente lo mejor es el trabajo realizado en el Metro del D.F. y los Juegos Olímpicos.

Y aquí viene la mentada (otra vez) de madre a Yayoi Kusama, les dejo estas joyas J-O-Y-A-S sobre el trabajo de Wyman las cuales le dan una patada en la cabeza a Kusama.


¡Como la traigas, Wyman!
"Por más de cinco décadas Lance Wyman (Newark, Nueva Jersey, 1937) ha sido pieza angular en el diseño contemporáneo por desarrollar una diversidad de sistemas de orientación y penetración del espacio urbano. De ida y vuelta es la primera muestra monográfica que explora su contribución a la historia del diseño de la urbe, en un singular diálogo con el contexto sociocultural en que inscribe sus proyectos. Cada trazo, imagen, logo e ícono de Wyman recrea el imaginario de un lugar. Su trabajo es un referente en la cultura visual global, que tuvo un punto de partida decisivo en la ciudad de México a fines de los años 60."
Sobre México 68

"Festivales globales
Desde mediados del siglo XX, eventos como los Juegos Olímpicos se caracterizan por ser un híbrido de festivales de competencia y espectáculos rituales. Su organización requiere un elaborado sistema de comunicación con infinitos productos e impresos, donde la presencia del diseño no sólo tiene propósitos prácticos, sino que define la identidad de las colectividades y marca la memoria social. Los Juegos Olímpicos de México 68 fueron especialmente importantes en términos de la proyección de la identidad de un país que reclamaba visibilidad por sus éxitos económicos, y al mismo tiempo pretendía una conexión con una cultura ancestral. El Estado vio en los Juegos Olímpicos la oportunidad de mostrar un México fuerte, moderno, capaz de captar los ojos del mundo, seducir al turismo y atraer inversiones extranjeras. Todo ello demandaba un sistema contundente y original de comunicación y diseño, que en gran medida emergió del trabajo de Lance Wyman."


Para mí este es el MÁS importante
"Microciudades
Además de haber codificado visualmente grandes metrópolis, Lance Wyman también ha creado sistemas de identidad y orientación para espacios confinados pero muy complejos: "ciudades” dentro de la ciudad: mercados de abastecimiento y zoológicos. En la Central de Abasto de la ciudad de México y los Zoológicos de Washington y Minnesota, Wyman utiliza colores, iconos y otros recursos gráficos para crear una identidad espacial coherente que va más allá de la comunicación pura. No sólo ordena visualmente el espacio, sino que, además, le otorga una personalidad cultural que crea lazos con quienes las atraviesan y habitan."

Este último es el más importante donde se concentra el eje de este post.

Expongo mi chaqueta mental que Wyman dio en el lugar indicado para generar una especie de identidad dentro de una urbe como la Ciudad de México, por el simple hecho del que acabo de exponer con Tepito. Los habitantes de la ciudad de México que utilizan a diario el metro se ven identificados con tal. Veamos algunos de los ejemplos sobre la vida cotidiana que se plasman en las paredes de dicho transporte.
Correspondencia de la estación Bellas Artes

Metro Garibaldi

Metro Garibaldi

Metro Garibaldi dedicado a los ciclistas de México

"Meeting of sales" en Garibaldi

"Meeting of sales" en Garibaldi

Metro Salto del Agua

Bonito mosaico (como en casi toda la línea 8) del metro Chabacano

Excelente mural del metro Viveros

Metro Insurgentes

Metro Insurgentes

Metro insurgentes (¿Los reconoces?)


Hay que recordar otros como el de Copilco, el de Universidad, Tacubaya (muy bonito) la arquitectura de San Lázaro y la de Candelaria, el túnel de la ciencia en la correspondencia de la estación "La Raza" etcétera.


¿Y el rock urbano?

Wyman se encargó de darle un poco de estilo a las señalizaciones, pero lo interesante de esto es cuando se ve por medio de los murales esa identificación que buscaba Wyman (o que sin querer lo encontró), ahora, el papel que tomó en cierta medida la sociedad para llevar a cabo esta identidad se ve precisamente en la música, que para efectos de este decadente post, es el Rock Urbano y también algunos otros géneros.

Analizando (¿Qué hay por analizar?) las letras se notan los rasgos identitarios en la música urbana, vayamos por partes.

Para plasmar un poco la vida cotidiana que se vive en las zonas populares de esta ciudad, diversos artistas han acudido a hacer letras que describan de la manera más precisa cómo se vive el día-a-día de las personas. Obviamente no diré todas, sólo las más sobresalientes o los que más se liguen al caso del metro.

Caso #1
La carencia. Panteón Rococó.

Por la mañana yo me levanto
no me dan ganas de ir a trabajar
subo a la combi voy observando
que toda la gente comienza a pasar

por la avenida va circulando
el alma obrera de mi ciudad
gente que siempre está trabajando
y su descanso lo ocupa pá soñar

Caso #2
C.D.A. Panteón Rococó


Buscando una forma de poderse superar
cada madrugada sale de su hogar
Juan no pide mucho, solo un cuarto y de comer
uno de sus sueños darle todo a su mujer.

Caso #3
Álbum "Cuatro Caminos". Café Tacuba

En este caso pongo el disco completo por la semejanza que tiene este disco con su origen que tiene la banda la cual es originaria de Ciudad Satélite en Naucalpan, donde en este disco el título haría una especie de mención hacia dicho municipio, dado que la estación "Cuatro Caminos" del metro se encuentra en Naucalpan y el dibujo de la estación hace referencia a la estructura conocida como "El toreo de 4 caminos" el cual fue derribado *llora*

Caso #4
El metro. Café Tacuba


Zócalo, Hidalgo, Chabacano
he cruzado un millón de veces.
he querido salir por la puerta
pero siempre hay alguien que empuja,
para adentro.
Y cuando en las noches pienso yo en ti
sé que tu te acuerdas de mí,
pero aquí atrapado en este vagón
no sé si volveré a salir.

Es curioso ver cómo la música se identifica a través de los diferentes barrios donde fueron creados diversos grupos, ya sea Ciudad Satélite, Tacubaya, Pantitlán, Santa Fe (cuando era un basurero... que según me informan lo sigue siendo), Ciudad Universitaria etcétera
Precisamente el caso de la música es al más crucial que quiero llegar porque en este arte se expresa de manera armónica la vida cotidiana de los ciudadanos que utilizan este transporte o que tienen historias que contar que sucedieron en las calles, y para esto se encuentra el Rock Urbano.


En el típico caso del grupo "El haragán", la letra de la canción "Mi muñequita sintética" habla sobre la vida de una niña que sufre de las adversidades por las que ha pasado tras haber consumido drogas como acoso sexual y otras cosas que pueden pasar en las calles.

Siguiendo escuchando este grupo, se puede encontrar la canción "No estoy muerto", donde expresa

"No estoy muerto simplemente estoy duermiendo
Simplemente, estoy cansado de vivir
la vida si estoy en crisis
No estoy muerto simplemente estoy durmiendo
No estoy muerto simplemente estoy un poco cansado"


Podría seguir escribiendo de estos grupos y colocar canciones que me gustan mucho como "No tengo tiempo" de Heavy Nopal, pero creo que me desviaría aún más de lo que ya me desvié.

Pero lo MÁS importante en este género y sobre lo que compete a este post es la canción "El metro Balderas", aquí la canción.

Bien, esta canción dice que quien la canta es "El tri" aquél grupo que todo mundo conoce y que ha escuchado grandes canciones de ellos, sin embargo la historia que engloba a esta canción es lo que hace interesante al metro Balderas y a muchos personajes.

Antes de 1985 el cantante conocido como Alex Lora tenía una estrecha relación con Rockdrigo Gónzalez, estos dos autores eran algo así como el referente de la música rock en México, de hecho el autor original de la canción fue Rockdrigo, sin embargo, al tener un descontento por la canción, el Tri hizo una versión absolutamente diferente a dicha canción, resultando en un pleito muy grave por dicha canción. Posteriormente y por desgracia, el 19 de Septiembre de 1985, Rockdrigo murió en el terremoto que sacudió a la Ciudad de México resultando en un pleito que se pudo haber resuelto, y como un honor a su obra artística se colocó una estatua de él con la letra de la canción mencionada, esto en 2004 para recordarlo, esta estatua adivinen dónde se encuentra...
¡En la estación del metro Balderas!
Para muchos capitalinos este tipo de arte que se ve en la cotidianidad es muy importante (donde se incluye el autor de este post), ya que el cúmulo de todo lo mencionado hace de la ciudad algo muy característico generando identidades que tienen un efecto (posiblemente) contrario al que pueda generar Kusama, ya que si se leyó el anterior, el autor menciona cierta peligrosidad sobre los cuerpos formados en una masa que cumple con ciertas taxonomías, este tipo de arte se tiene que ver a través de museos o exposiciones cuando el arte hecho por Wyman se puede ver en la cotidianidad y con un efecto social meramente consolidante, donde los ejemplos para justificar esto ya fueron expuestos, es decir, que dicho arte no se ve desde una perspectiva única o de manera aislada, sino que el efecto que tiene se materializa en música y en obras artísticas como murales, rescato esa como la importancia principal que gira en torno a Wyman y contrarrestando lo que se pudo haber visto con Kusama (Malditos hipsters posmodernos)

Y esta unificación de identidades es demasiado demasiado importante porque repercute totalmente en el ambiente social que se pueda suscitar en el transporte colectivo. En el caso particular del autor, no se podría transitar en las calles de mi colonia, en los pasillos del metro mentando la madre a las personas pasar, porque ciertamente yo soy parte de esa gran masa llamada Sociedad y ante la cual uno forma parte, es decir; en mi caso yo no podría dedicarme a repartir un sucio desprecio hacia los demás por el simple hecho de que son mis semejantes y como tales, significaría faltarme el respeto a mí mismo, algo inaceptable. Al menos considero que si las ideas expuestas sobre las obras de Kusama son ciertas, este sucio desprecio se convierte en válido. No en este particular caso, ya que habría que hacer la diferencia entre "odio" y "desprecio", si bien se pueden tener fobias u odios sociales, estos no repercuten necesariamente en un desprecio.
No quiere decir que el hecho de que se tenga un odio universal hacia la sociedad o hacia el mundo signifique que uno sea amoroso con todos y que se vea todo de manera más gay... tampoco se trata de eso
Se trata únicamente de entender los códigos de conducta que existen en diferentes ocasiones, cuando se camina en las calles, se anda en metro o en cualquier transporte, porque si bien existen actividades protocoloarias o "clichés" para ocasiones formales o especiales también se deben tener respeto a esos códigos cotidianos.
Entonces, en una aproximación hacia los odios sociales, se podría decir que son producto de un posible desentendimiento de algunos códigos o desprestigio de estos, resultado de una diferencia social marcada por estereotipos o posesiones.
Resumo lo que acabo de mencionar en la siguiente frase:

"No desprecio a los hombres. Si así fuera no tendría ningún derecho, ninguna razón para tratar de gobernarlos."


- Marguerite Yourcenar en "Las memorias de Adriano"

¿Vas pa'l barrio?

La música viaja en metro, y no hablo precisamente de los castrosos vagoneros que ponen las mismas canciones en el metro, sino que hablo de los murales que están en 2 estaciones diferentes hechas por el misma autor (me parece) que ilustran etapas de la música Rock en diferentes países.

Para comenzar, veamos la obra que se encuentra en la estación Auditorio, donde se encuentra un gran mural de la música en inglés. Donde se ven artistas muy conocidos como Bono, Kurt Cobain, The Beatles, Jimi Hendrix, Jimmy Page, Lemmy Kilmister, Keith Richards, el pendejo de Santana, etcétera
















Y las obras que están en Chabacano, donde son ahora de grupos mexicanos, como El tri, La Maldita Vecindad, Charly Montana, Botellita de Jerez, Rockdrigo González, etcétera

Para concluir comparto una experiencia muy gratificante ante la cual fue testiga una ávida lectora de este post.

Este personaje, Rockdrigo González, fue un gran artista y muy influyente dentro de la música Rock en México e influyó en grupos como Botellita de Jerez, donde su baterista (y aún mejor como solista) Francisco Barrios "El Mastuerzo" tiene canciones excelentes.

Pues un día saliendo de trabajar tuve la gran dicha de toparme con él y su grandiosa combi, como la persona tan chida que es, se bajó de ella al pedírselo y se tomó una foto conmigo (sin duda recuerdo dicho día con gran felicidad).
¡Esta es la mejor rola de este cabrón!